La abogada chaqueña que fue asesinada en Paraguay, Laura Casuso, recibió una llamada misteriosa poco antes de su crimen y salió repentinamente de una reunión. "Voy a tratar de evitar algo más feo" fueron las últimas palabras de la argentina mientras se retiraba del lugar en el que se encontraba. Así lo informó el comisario Germán Arévalos, jefe de Investigaciones de Amambay, escenario del asesinato.
Casuso, que estaba radicada en Paraguay desde hace 20 años, era la representante legal de dos narcos brasileños. Defendía a Jarvis Chimenes Pavão, extraditado a Brasil a fines de diciembre y clave en la estructura del Primeiro Comando da Capital (PCC), una banda armada de delincuentes conformada por expresos brasileños. También representaba a Marcelo Pinheiro Vega, supuesto jefe del grupo criminal Comando Vermelho, que surgió en Río de Janeiro en 1969 y extendió sus operaciones a Paraguay.
Arévalos indicó que no encontraron el celular de la abogada en la escena del crimen. Además, el jefe policial señaló que una de las mujeres que estuvo en la reunión fue una de las primeras en asistir a la letrada al Hospital Regional de Pedro Juan Caballero, pero luego desapareció, según informaron en el diario hoy de Paraguay.
Los investigadores buscan identificar a las personas que estuvieron en ese encuentro con la abogada, en los minutos previos a su asesinato. También se comunicarán con el hijo de Casuso para saber si su mamá había recibido amenazas.
Casuso fue asesinada de diez disparos este martes en la ciudad paraguaya de Pedro Juan Caballero. Un hombre le disparó en reiteradas oportunidades y huyó en una camioneta negra que luego encontraron abandonada. El hecho quedó registrado en las cámaras de seguridad.
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