Tristán, reconocido humorista de extensa trayectoria en el teatro y cine argentinos, protagonizó un confuso episodio esta mañana en su departamento del barrio porteño de Recoleta, donde las primeras versiones indicaban que se había atrincherado con un arma luego de amenazar a uno de sus hijos en plena discusión.
Según informó inicialmente su entorno a la Policía de la Cuidad de Buenos Aires, que se hizo presente en el lugar, el comediante de 83 años estaba armado y, minutos antes de amotinarse, se había peleado con su hijo menor, Federico Díaz Ocampo (35), a quien increpó y echó del domicilio ubicado en la calle Beruti al 2400.
"Fue un susto porque pensamos que le había pasado algo", explicó Federico, en diálogo con "Nosotros a la mañana" (El Trece) mientras su padre era asistido por profesionales de la salud. Y contradiciendo la información que había trascendido, negó haber sido amenazado por su papá. "Por protocolo, llamé a la Policía, los Bomberos y el SAME para que me abriera la puerta", agregó el joven.
Por su parte Hernán Rado, otro de los hijos del cómico que se comunicó con el 911 para solicitar un móvil policial, ratificó en diálogo con Crónica que "cuando llegó la policía, papá estaba durmiendo". Sin embargo, y discrepando con su hermano, aseguró: "Tuvimos un roce familiar".
Luego de permanecer casi media hora al otro lado de la puerta blindada de su vivienda, y evitando cualquier tipo de comunicación, Tristán accedió a ser atendido por médicos del SAME, quienes más tarde lo trasladaron en una ambulancia.
Tristán atraviesa un cuadro de Alzheimer hace tiempo y ese podría haber sido el motivo del supuesto cruce verbal con uno de sus hijos.
