Matías Paredes, uno de los históricos del seleccionado argentino de hockey sobre césped y campeón olímpico, motorizó la idea y sus compañeros de los Leones la aceptaron enseguida, como hicieron en otras oportunidades.
En la tarde del jueves, el delantero, junto a varios de sus compañeros y parte del staff técnico del equipo, visitaron la Casa Garrahan para darles un poco de alegría a los chicos internados a quienes les llevaron libros y juguetes. Además, el plantel llevó una camiseta que fue entregada a las autoridades de la entidad. El equipo compartió un rato con los chicos, jugando y charlando.
La Fundación Garrahan presta especial atención a las necesidades sociales y emocionales de los pacientes y sus familias. Es por ello que el 25 de marzo de 1997 inauguró la Casa Garrahan para brindar un hogar a los niños, junto a sus madres, que residen a más de 100 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires y se atienden en los hospitales Elizalde, Garrahan o Gutiérrez mientras cumplen tratamientos médicos ambulatorios o esperan diagnósticos de complejas enfermedades que no requieren internación.