Todo comenzó por la denuncia que indicaba que jugadores de las inferiores de Independiente fueron objeto de abusos sexuales y pedofilia, y uno de los involucrados en la red de trata es otro futbolista de las juveniles del Rojo. Pero hay más involucrados.
Además, está metido el árbitro asistente Martín Bustos, quien tiene una orden de detención. Habría otros tres adultos involucrados, que la Justicia busca detener en las próximas horas.
Bustos, quien les pagaba a los chicos por sexo, estaba designado para formar parte de la terna arbitral del próximo domingo a las 19 en el partido entre San Martín de Tucumán e Instituto, por la B Nacional, pero fue removido.