Este miércoles se conoció que la autopsia al cuerpo de Débora Pérez Volpin arrojó perforaciones en el esófago y el estómago, pero pocos saben de qué se trata esta lesión y las probabilidades de que suceda en una endoscopía.
La perforación esofágica se trata de un orificio en el esófago que permite que sus contenidos pasen al pecho o tórax, ocasionando a menudo una infección del mediastino (mediastinitis).
A su vez, también puede derivar en infecciones, hemorragias masivas y, en casos menos frecuentes, paro cardíaco.
¿La causa más común? Una lesión durante un procedimiento médico, pero las posibilidades de que suceda en una endoscopía está en un rango de entre 0,006% y 0,06%.
En cuanto a las causales menos habituales, se encuentran los golpes en la zona del esófago y lesiones durante una cirugía en otro órgano cercano.