La ciudad balnearia de Pinamar, donde ocurrió hace 21 años el asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas, fue escenario este jueves de dos actos en su homenaje, uno por la mañana, donde se plantó un árbol junto al monolito que lo recuerda -se coloca uno en cada aniversario- y otro por la noche, con la movilización de vecinos y reporteros gráficos.
Además hubo homenajes en la redacción del diario Perfil, medio gráfico para el cual trabajó Cabezas, otro en la entrada de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (Argra), a la que pertenecía el fotógrafo asesinado en 1997 y actos similares en todo el país.
A los actos en Pinamar asistió la hermana de Cabezas, Gladys, el intendente, Martín Yeza, además de colegas gráficos de distintos medios de prensa y vecinos de la ciudad.
Gladys Cabezas, en diálogo con Télam, dijo que la familia "no baja los brazos", lo extraña y lo sigue recordando" aunque judicialmente "no hay nada por hacer" y, por más que exista la Ley de la Víctima "no es retroactiva. Hoy estas 200 personas que nos acompañaron nos siguen demostrando que la justicia la hacemos nosotros homenajeando y recordando a la gente de bien", dijo.
"Yo en particular -agregó- me sumo y apoyo a todas aquellas personas que han sufrido pérdidas como la mía, en accidentes de tránsito, por negligencia de alcohólicos al volantes; es una forma de rendir homenaje a mi hermano, víctima de este crimen atroz y no pensar tanto en que todos sus asesinos están en libertad y sin haber cumplido condena alguna" remarcó.