Furiosos. Así estaban los vecinos de General Roca, localidad ubicada al sureste de la capital provincial, después de confirmarse el deceso de un comerciante conocido y querido en esa localidad. El asesinato de Camilo Grassano (57) fue el comentario del pueblo del departamento Marcos Juárez que obligó a la comunidad a involucrarse en una protesta social. Y eso ocurrió en la comisaría después de que se diera la noticia de la muerte del comerciante que recibió tantos golpes que obligaron al traslado a un hospital. El hecho, en supuesta ocasión de robo, desencadenó en una muerte por pérdida de masa encefálica. Tras un ataque con una plancha de hierro, el hombre quedó en estado crítico que se agudizó y del que no pudo salir.
Por esto, los vecinos pidieron justicia frente a la dependencia policial.