Miles de personas se movilizaron este martes al Congreso de la Nación para reclamar justicia por el crimen de Fernando Báez Sosa ocurrido hace un mes en Villa Gesell. Y al mismo tiempo, en la localidad balnearia, el obispo de la ciudad de Mar del Plata, monseñor Gabriel Mestre, presidió una misa.
Vecinos de la Villa Gesell y turistas que eligieron la segunda quincena de febrero para sus vacaciones se sumaron a la convocatoria, que tuvo lugar frente al boliche Le Brique, donde un grupo de rugbiers golpeó hasta matar al joven porteño. En el lugar se vieron carteles con leyendas como "justicia por Fernando" y "no fue una desgracia, fue un crimen".
La misa contó con un mensaje del papa Francisco para repudiar el asesinato del joven, ocurrido en la madrugada del 18 de enero último. "Queridos hermanos, sé que celebrarán una misa en Villa Gesell al cumplirse un mes del asesinato de Fernando Báez. Quiero asegurarles mi compañía espiritual ese día. También yo celebraré la eucaristía por Fernando y sus padres", indicó el sumo pontífice.
"Por favor, no se olviden de rezar por mí. Que Jesús los bendiga y la virgen santa los cuide. Fraternalmente, Francisco", cerró la carta.