El presidente Mauricio Macri se mostrará este jueves con su colega de Brasil, Jair Bolsonaro, en la 55° Cumbre de Jefes de Estados del Mercosur y Estados Asociados que se realiza en la ciudad brasileña de Bento Gonçalves, en el estado de Río Grande del Sur.
Ante un bloque que no tendrá grandes definiciones a nivel regional, Macri y Bolsonaro darán un mensaje de apertura y llamarán a una mayor liberalización de la economía de la región, según consignó la agencia Télam.
Será un postulado que tendrá su peso a partir del recambio de gobierno no sólo en Argentina, donde Macri traspasará el mando el martes al peronista Alberto Fernández, sino también en Uruguay a partir de la victoria del candidato de centro-derecha Luis Lacalle Pou en las elecciones presidenciales.
Pese a la intención de Brasil de flexibilizar la economía del bloque y abordar una eventual baja del Arancel Externo Común (AEC) de los países miembro, voceros de la Cancillería argentina indicaron a Télam que "no está previsto que en esta cumbre se tome ninguna decisión sobre esa revisión".
"La mesa técnica del arancel externo está trabajando en eso hace un año y seguirá trabajando", completaron las fuentes.
En la reunión del Consejo del Mercado Común que se hizo este miércoles, y de la que participan los cancilleres de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, cada uno de los socios presentó un diagnóstico integral sobre el estado actual del AEC.
Los cuatro países coincidieron en la importancia del "diálogo público-privado a la hora de avanzar en el proceso de revisión del AEC", por lo que se acordó que los "trabajos de diagnósticos alcanzados se presentarán en 2020 al sector privado".
El encuentro se iba a realizar a mediados de diciembre, pero fue adelantado por Bolsonaro tras los cruces con Alberto Fernández. De hecho, no habrá en la cumbre representantes del nuevo gobierno argentino.
En la reunión, además, Bolsonaro traspasará la presidencia pro tempore del cuerpo, que es semestral, a su par paraguayo, Mario Abdo.
A la cumbre asistirán, además de Macri, Bolsonaro y Abdo, la vicepresidenta de Uruguay, Lucia Topolansky, y los cancilleres Teodoro Ribera (Chile) y Karen Longaric (Bolivia).