Las elecciones primarias del 11 de agosto dejaron un escenario complicado para la reelección del presidente Mauricio Macri, quien deberá lograr una proeza a fin de alcanzar un segundo mandato. Sin embargo, los números necesarios no son imposibles.
En primer lugar, el presidente necesita que la asistencia a las urnas sea récord. Eso lo sabe, tal como quedó demostrado en el acto que realizó el sábado en el Obelisco, cuando dijo que "tiene que ser la elección de mayor asistencia desde 1983, por eso, ¡todos a votar!".
En el hipotético caso de que el candidato por el Frente de Todos, Alberto Fernández, mantenga el mismo número de votos que obtuvo en las PASO (12.205.938), Macri necesitaría que 2.524.336 personas que no votaron en las primarias sí lo hagan en las generales (y no voten ni blanco ni nulo). De esta manera, según Clarín, se ampliaría la base de votos afirmativos y el porcentaje de Fernández bajaría al 44,9%, el límite para que haya balotaje.
En el caso de que eso más de 2,5 millones de votantes se acerquen a las urnas el próximo 27 de octubre, el presentismo rozaría el 84%, un valor que solo se superó en 1983, con la primera elección después de la dictadura (85,61%) y en el 89 (85,31%).
También hay que tener en cuenta que en las PASO hubo 1.400.000 votos blancos, nulos o impugnados. Si esos votantes ahora eligen un candidato, habrá más votos afirmativos sin que necesariamente haya más gente que se acercó a votar.
Está claro que es necesario que se amplíe la cantidad de votantes para que Fernández baje el porcentaje de votos, ya que si repite el 49,5% de las PASO, no hay segunda vuelta.
Sin embargo, eso solo no alcanza. Además de que Fernández pierda porcentaje, Macri necesitar sumar. El presidente obtuvo 32,9% de los votos en las PASO, pero si logra que Fernández baje del 45%, él deberá quedar a menos de 10 puntos para llegar al balotaje. Entonces, para ir a una segunda vuelta, Macri debería crecer hasta los 35 puntos porcentuales.
En otras palabras, pasar de los 8.121.689 sufragios que cosechí en las primarias a cerca de 9,5 millones. En 2015 ya ocurrió algo parecido: Macri creció 1,8 millón entre las PASO y las generales.
Por último, hay 300 mil electores que en las PASO eligieron a candidatos que no superaron esa intancia. Se trata de los precandidatos Alejandro Biondini, Raúl Albarracín, José Antonio Romero Feris y Manuela Castañeira. De para dónde se inclinen su votantes también dependerá la elección del próximo domingo.