Tigre, a pesar de haber descendido a la B Nacional, dio la sorpresa este domingo por la noche y se consagró campeón de la Copa de la Superliga tras vencer 2-0 a Boca en la final. Y antes de la premiación, el "Matador" tuvo un gran gesto: armó un pasillo para aplaudir a los futbolistas del "Xeneize" que subieron al escenario a recibir sus medallas.
Uno a uno, los jugadores del equipo perdedor fueron pasando por el pasillo y chocando las palmas de los ganadores. Sin embargo, Mauro Zárate dio la nota al bajar la cabeza y no saludar al rival.
Este hecho generó indignación en las redes sociales y el delantero fue duramente criticado por los usuarios.