Cabuleros como pocos, el Chacho Coudet es conocido por sus cábalas y rituales antes de los partidos. Alumno de la escuela del Coco Basile y el doctor Carlos Bilardo, el entrenador de Racing siempre está alerta ante las posibles "mufas".
Y esta vez volvió a demostrarlo. Mientras daba una conferencia de prensa, donde aseguró que continuará al frente del equipo de Avellaneda, una pregunta de la prensa lo tomó por sorpresa.
Un periodista le preguntó si le deba tranquilidad las estadísticas de Racing jugando de local (hace un año que no pierden, salvo con Boca, nunca reciben más de dos goles) y se tiró para atrás, bajó la mano y sonrío.
No es la primera vez que el entrenador hace de las suyas para evitar malos augurios para su equipo. Es recordada la bufanda negra de Coudet en todos los partidos. Una cábala que nació como un look en Rosario Central, en 2015. El equipo incorporó su impronta futbolística rápidamente, comenzó a edificar una gran campaña en el certamen local y a avanzar en la Copa Argentina y el Chacho no se sacó más la bufanda.
Esta vez la reacción fue para evitar que lo "mufen" como dicen en el ámbito futbolístico, y el equipo campeón de la Superliga espera por Estudiantes para poder avanzar en la Copa de la Superliga. En el partido de ida el resultado fue 1-1 y este sábado desde las 20 en Avellaneda Racing recibirá al Pincha.