Un nuevo caso de violencia de género se registró en Río Negro Sin embargo, no es reciente, sino que lleva años de denuncias, pero, según la víctima, sin medidas tomadas por la justicia. La joven de 21 años se separó hace casi tres años de su pareja pero las amenazas no cesan y necesita ayuda. Además tiene una hija de 4 años con su ex, que quedó en el medio del campo de batalla.
“Ya llevo un año sin salir a la calle porque tengo miedo de cruzármelo. No me dieron ningún botón antipánico ni nada, lo único que me dieron fue un psicólogo como si yo fuera la loca”, aseguró la joven quien ya realizó reiteradas denuncias ante la Comisaría de la Familia y el Fuero de Familia Nº 7 de Viedma.
Selena cortó la relación con su ex pareja luego de varios hechos de violencia verbal y física, seguido de amenazas. La joven y su pequeña hija se quedaron en la calle y fueron acogidas por una mujer que conocieron en la iglesia. Sin embargo, su ex se enteró dónde estaba y comenzó a amenazar a la mujer que la ayudaba y al hijo de ella. Además, según la joven, el padre de su ex filmó el frente del domicilio.
“Tengo todas las denuncias en mi casa. Hasta iban a molestar al jardín de la nena y me la querían sacar, porque yo no quiero volver con él”, explicó. “La nena me contó que la hacían dormir con un nene, que la dejaban afuera con frío cuando ellos tomaban, que él le pegaba porque no la aguantaba más y le dijo que me iba a matar si yo no volvía con él”, dijo la joven en diálogo con Noticias Net.
Según explicó, sus exsuegros se llevaron a su hija por 20 días. “En la comisaría me tomaban exposiciones nomás, hasta que los abuelos me citaron para que les dé un permiso y si yo firmaba ese permiso se la iban a llevar a Los Menucos, Río Negro así no firmé nada y les saqué la nena”, contó Selena.
Cuando estaban juntos la pareja vivía en Patagones, pero luego Selena y su hija se mudaron a Río Negro y las amenazas con ellas. “Incluso llegó a decirme que me iba a mandar a matar con los del gremio”, aunque ella se comunicó con el representante sindical, quien negó los hechos.
“Ya es cansador esto, yo no puedo andar por la calle, no puedo hacer nada. El año pasado tuve que ir con la policía a retirar a mi nena del jardín, porque él estaba ahí, así que dejé de mandarla”, dijo. Actualmente la joven vende tortas para que ella y su hija puedan vivir ya que no recibe la cuota alimentaria correspondiente.
Si sos víctima de violencia de género, o sabés de alguien que lo sea, llamá a la línea 144. Es gratuita, nacional y brinda contención, asistencia y acompañamiento las 24 horas, los 365 días del año.