El Movimiento de Mujeres de Ushuaia (MMU) acudió este viernes 5 de octubre al Tribunal Superior de Justicia de Tierra del Fuego para intentar obtener un fallo que obligue al Concejo Deliberante de la capital fueguina a garantizar el acceso femenino a las bancas, ya que en la actualidad, la totalidad de los siete concejales son hombres.
El MMU presentó un recurso de amparo que logró una sentencia favorable por parte del juez Electoral del distrito, Isidoro Aramburú, pero la medida fue revertida por un pronunciamiento de la Sala Civil de la Cámara de Apelaciones de la provincia.
La controversia se produjo porque si bien la Carta Orgánica de Ushuaia garantiza un cupo femenino del 50% en la conformación de las listas, en la ciudad convive un régimen electoral de preferencias, que permite al elector alterar el orden original de las candidaturas, prefiriendo con un tilde a un candidato por sobre otro.
De esta forma, en los comicios de 2015, todas las postulantes mujeres al Concejo Deliberante relegaron sus lugares porque los varones lograron un mayor porcentaje de preferencias.
El movimiento feminista pretende obligar al Concejo a tratar cuatro proyectos (que fueron enviados al archivo el año pasado sin ser discutidos) para que el régimen electoral priorice la paridad de género por sobre el sistema de preferencias.
Con el sistema de preferencias, un 15% del electorado (los que prefieren candidatos) deciden por sobre el 85% restante que no prefiere, lo que también da cuenta de la vulnerabilidad del sistema electoral en materia de igualdad real en la representación política y termina volviendo endebles los argumentos mencionados contra la paridad, fundamenta el escrito que ahora evaluará el Superior Tribunal fueguino.
Según el MMU, el objetivo es persistir hasta alcanzar la paridad efectiva en las bancas, porque sin mujeres no hay democracia y la situación tiñe de vergüenza a todo el sistema político argentino, afirmaron.