Un hecho aberrante tuvo lugar en la ciudad de Juan Bautista Alberdi en el sur tucumano. Una mujer fue imputada, acusada de prostituir a su nieta, a la cual promocionaba y arreglaba citas con hombres a través de Facebook. La acusada tiene la guarda de la víctima y de sus hermanos, también menores de edad, ya que su madre falleció hace tres años.
El Ministerio Público Fiscal resolvió el cierre de la investigación iniciada en su contra y la elevación a juicio del caso. La causa se originó el año pasado tras una denuncia efectuada por una tía de la menor.
De acuerdo al expediente, la mujer denunciada es la abuela materna de la víctima, que además está a cargo de su guarda y la de sus hermanos menores, ya que su madre había fallecido hace tres años.
La acusada obligaba a la adolescente a mantener encuentros con hombres a cambio de dinero, a quienes ofrecía los servicios de su nieta a través de las redes sociales. Para ello, había creado una serie de cuentas apócrifas con las cuales se contactaba con hombres. Mediante esas cuentas enviaba fotos y pactaba encuentros por los cuales cobraba diferentes sumas de dinero.
Durante la declaración testimonial realizada en Cámara Gesell, la víctima aseguró que su abuela la obligaba a sacarse fotos para enviarlas por medio de las cuentas truchas que había creado en Facebook y por las cuales pactaba las citas. Con respecto a esos encuentros manifestó que los mismos se producían en lugares públicos y a veces en las casas de los clientes y que su abuela la llevaba hasta esos lugares y la esperaba.
La fiscalía imputó a la mujer por los delitos de promoción y facilitación de la prostitución agravado. Durante la formulación de cargos el fiscal Assad consideró que la acusada se aprovechó de la autoridad que tenía sobre la víctima y de la condición de vulnerabilidad de la misma para obligarla a cometer esos actos.
La imputada, en tanto, se encuentra a la espera de la realización del debate oral donde será juzgada. En relación a la pretensión punitiva, fuentes del caso indicaron que requerirán una condena de ocho años de prisión efectiva.