La Asociación de Aviación Civil (ANAC), la Policía Aeroportuaria, bomberos de la Aerostación, personal del Sistema Provincial de Salud, Defensa Civil, Policía y bomberos voluntarios locales, participaron en el simulacro aérero en el aeropuerto Benjamín Matienzo.
El objetivo de la actividad fue para conocer y valuar dónde se puede mejorar. A la actividad participaron aproximadamente 250 personas.
Francisco Barreiro, responsable de la Dirección de Emergencias, dijo: "La idea es que, como cualquier simulacro que estamos tratando de hacer, pongamos en evidencia no solamente las cosas buenas, sino también las fallas que a veces tenemos para ir corrigiéndolas porque de eso se aprende mucho".
El ejercicio termina con la preparación de los hospitales, principalmente los tres efectores que contienen a las "víctimas" de este simulacro de accidente son, el Centro de Salud, el Padilla y el Avellaneda. Por eso, quedan en evidencia "los errores y aciertos que tienen en este tipo de situación y ver cómo se puede ir puliendo detalles ante eventos que puedan ocurrir".
Desde la Dirección de Emergencias trabajan en la capacitación de la gente. "Tenemos un padrón de gente capacitada y entrenada que convocamos ante situaciones de estas características para que nos ayuden. El caos inicial puede llegar a demorar entre 30 y 45 minutos hasta que se restablece un orden dentro de eso y poder empezar a trabajar. Las situaciones son críticas, desesperantes, la gente tiene mucha confusión y es necesario trabajar ordenadamente", comentó Barreiro.
El evento o desastre tiene un organigrama de funcionamiento. En este caso, al ser aeropuerto, los primeros que intervienen son el personal de bomberos, policía federal. Luego se refuerza la seguridad con personal de ANAC y se convoca a Defensa Civil, Dirección de Emergencias y bomberos periféricos.
Por su parte, el responsable de la Dirección General de Salud Mental y Adicciones, Walter Sigler, comentó: "Fue una experiencia muy productiva porque esta es la realidad. Sirve para reflejar lo que sucede día a día con la sociedad frente a lo que son los distintos tipos de dolencias. En esta actividad pudimos demostrar claramente que la emergencia en salud mental no únicamente está en los hospitales. Los grandes acontecimientos que pasan con disturbios sociales requieren mucha contención".
También se trabajó con diferentes tipos de usuarios, personas que estaban con crisis de excitación, detenidas por el disturbio en la vía pública o en el lugar donde fue el accidente. Además se trabajó de forma conjunta con alumnos y docentes de la facultad de psicología.
Ante este tipo de situaciones, los profesionales de salud mental debe realizar la contención a la comunidad: los mensajes deben ser claros, no se debe generar muchas expectativas, información precisa, frente al disturbio no actuar con base en el miedo y sostenerse firmes actuando en equipo.
A su vez, el jefe de Defensa Civil, Fernando Torres, dijo que "el ejercicio fue muy importante ya que se pone en práctica lo aprendido". Y agregó: "De esa manera nosotros manejamos los tiempos, los espacios que vamos a necesitar para cubrir emergencias y salir adelante. Eso es lo que se logró. Hay mucha gente que ya está preparada para esto. Pusimos a disposición todo el protocolo. Se puede mostrar el equipo y despliegue de respuesta en la provincia".
Finalmente, el jefe de Aeropuerto de la ANAC, Marcelo Persia, contó que "se está cumpliendo con la normativa que exige que cada determinado periodo se realice un simulacro de un accidente de aeronave".
"Los hicimos simulando la aeronave, los pasajeros, las víctimas, los heridos. Fingiendo la parte pública y los familiares, la contención por parte de seguridad de PCA y la Dirección de Emergencias y Defensa Civil en el traslado de los heridos a los hospitales. Los resultados siempre son excelentes y sobre los detalles que tenemos que mejorar, después hacemos la evaluación", cerró Persia.
