La ministra de Educación de Santa Fe, Claudia Balagué, lamentó que no comiencen las clases, tras el anuncio de paro por 48 horas de los docentes públicos que además adherirán al paro de mujeres del 8 de marzo.
"Desde el Gobierno se hizo el mayor de los esfuerzos para llegar a un acuerdo", sostuvo la funcionaria.
Los docentes nucleados en la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) consideraron insuficiente el ofrecimiento de la Provincia que carecía de una cifra de aumento inicial y contemplaba una cláusula gatillo con tope, supeditada a la recaudación del Estado.
"Hemos garantizado que continúen los aumentos de los salarios docentes y que muchos de éstos sepan que tienen un lugar de trabajo seguro", agregó Balagué.
La funcionaria también destacó que a diferencia de otros empleados, los docentes tienen "estabilidad laboral". "Ofrecimos miles de cargos y horas para que cada uno sienta que en Santa Fe puede trabajar hasta el día de su jubilación", destacó.
Por la medida de fuerza lanzada por el gremio, las clases no comenzarán el 6 de marzo como estaba estipulado y se advirtió que de no haber una oferta superadora se extendería la medida de fuerza por otras 48 horas a la semana siguiente.