Cinco hombres de entre 20 y 31 años quedaron bajo prisión preventiva el último viernes en el marco de la investigación sobre el asesinato de Rocío Vera en Reconquista. Las autoridades plantearon que el femicidio fue cometido por uno de ellos junto a uno de los dos menores bajo sospecha, aunque todos los adultos fueron acusados por la violación grupal.
En base a las pruebas recolectadas durante la semana, el fiscal Aldo Gerosa señaló a Pascual Fagundes (21) como autor del crimen en compañía de un adolescente presente la noche del sábado 11 de julio en la casa donde funcionaba la despensa Santa Rita.
El funcionario agregó que Brian Altamirano (20) y los hermanos Juan (30) y Diego Godoy (28) intervinieron como partícipes primarios cuando "sujetaron y golpearon" a la chica de 14 años. En cuanto a Luis Quintana (29), lo señaló con un menor grado de responsabilidad penal por colaborar con "el traslado y ocultamiento del cuerpo" y de pertenencias de la muchacha.
En primera instancia, el MPA propuso definir el hecho como homicidio triplemente agravado por media violencia de género, por la intervención activa de menores de edad y críminis causae. A ese delito se suma el de abuso sexual agravado y de momento no se incluyó la acusación por aborto, pero los investigadores creen que "algunos o todos los imputados" sabían que Rocío estaba embarazada.
Gerosa comentó que los detenidos expusieron sus intenciones ni bien la chica ingresó al lugar. "Le dijeron que la iban a violar", aseveró. Ella se negó, comenzó a gritar e intentó resistirse, pero empezaron pegarle para luego agredirla sexualmente.
De acuerdo a la teoría del fiscal, el grupo llevó a la adolescente a un pastizal en un terreno lindero y la tiraron sobre "un montón de tierra y basura". Mientras estaba con vida, la violaron allí nuevamente. Respecto de lo ocurrido tras las horas de agonía y la muerte de la chica, el representante del organismo judicial sostuvo que los asesinos regresaron con una azada para remover el suelo y disimular las manchas de sangre. A continuación, empujaron el cadáver para ocultarlo entre la maleza.