Marcelo Aparicio, secretario gremial de la Federación de Camioneros, confirmó que Cliba rescindirá el contrato para recolectar los residuos en la ciudad por la millonaria deuda que el municipio tiene con la empresa.
En diálogo con Aire de Santa Fe, Aparicio precisó: "Estamos muy preocupados por la situación de los trabajadores. Hay más de 400 familias que dependen de estos empleos. No vamos a permitir que dejen la gente en la calle".
En la actualidad, la deuda supera los 300 millones de pesos aunque con la factura de octubre la misma ascenderá a los 350 millones de pesos.
Las advertencias de Cliba llevan varios meses y el 22 de septiembre pasado la firma decidió sacar de circulación nueve de los doce camiones que tenía en la ciudad y los reemplazó con unidades más viejas que la firma trajo de Buenos Aires. Finalmente tras los constantes reclamos, la compañía decidió rescindir el vínculo el próximo 8 de noviembre.
Por otro lado, el municipio también mantiene una deuda con Urbafe, la otra empresa encargada de la recolección de residuos de la ciudad. La misma es de alrededor de 300 millones de pesos si se suma la factura de octubre.
Pero no todo queda allí. El municipio también mantiene un atraso con Milicic, la firma que gestiona el relleno sanitario lo que en total suma 700 millones de pesos.
