En el segundo semestre del año el impuesto inmobiliario registra un aumento que puede variar del 10 al 25 por ciento, respecto al primer trimestre. Esa suba anual fue aprobada en diciembre por la Legislatura provincial.
El incremento se aplicó de modo gradual para llegar a un monto anual de entre un 25 y 40 por ciento. Así, en la segunda parte del año, se pueden recibir incrementos de entre el 10 y el 25 por ciento, de acuerdo a las distintas categorías.
"Para evitar que el contribuyente recibiera en un solo saldo el aumento de este año, entonces en el primer semestre se paga un monto y en el segundo semestre será otro, para que el impacto sea gradual. En las cuotas uno a tres hubo un valor y en las cuotas cuatro a seis es otro valor", detalló el secretario de Finanzas provincial, Pablo Olivares.
“A pesar de que la inflación fue del 50 por ciento, el aumento fue de un 26 por ciento para los contribuyentes que estaban al día, y de un 35 por ciento para los inmuebles de menor categoría constructiva, y de un 40 por ciento para los inmuebles de mayor categoría constructiva”, agregó.