El juicio por el brutal crimen de Paula Toledo en 2003 ingresó en la etapa final. Este lunes el fiscal Pablo Peñasco dio su alegato y solicitó una condena de 25 años de prisión para Marcos Graín, el único acusado por la violación en manada, tortura y muerte de la joven.
El fiscal Peñasco aseguró que el acusado fue clave en el crimen porque ofició como “entregador”.
Durante las cuatro horas que duró el alegado de la fiscalía, jsutificaron la hipótesis de que el hecho no podría haberse cometido sin la participación de Graín ya que la joven confió en él para salir de la casa e ir hasta la casa abandonada donde comenzó la violación.
Peñasco aseguró que “Paula no habría concurrido a la vivienda sin la presencia de Graín, éste se retiró del lugar y dejó a la víctima en manos de los sindicados (por Iván Gauna y los hermanos Víctor y Alejandro Echegaray que no pueden ser juzgados por el hecho) quienes la agredieron primero para abusar de ella sexualmente después”.
“Graín fue el entregador, la llevó seducida y confiada pero la traicionó y la entregó, contribuyó necesariamente al abuso sexual agravado por el acceso carnal con la participación de dos o más personas”, resumió el fiscal.
El juicio continuará este martes con los alegatos finales de los abogados querellantes que representan a Nuri Ribota, la madre de Paula Toledo, y el miércoles está previsto que realicen el alegato los defensores del imputado.
A partir de esa instancia, el tribunal compuesto por Néstor Muricia, Alejandro Celeste y Esteban Vázquez Soaje darán lugar a las réplicas de cada parte, si es que se presentan, y luego estarán en condiciones de dictar una sentencia.