La muerte de Mario Echeverría en la mañana del miércoles, no terminó con la principal incógnita que tienen las autoridades sanitarias, como pudo el hombre de 74 años del distrito sanrafaelino de Jaime Prats contraer coronavirus.
Si bien tenía un almacén en la casa, Echeverría no atendía a la clientela hace tiempo. Un año atrás le detectaron cáncer de pulmón y la enfermedad estaba tan avanzada que lo mantenía postrado. Esa situación hace difícil que haya tenido contacto con alguien más allá de la familia directa o alguna persona que fue a visitarlo.
Mientras indagan para determinar la fuente del contagio, las autoridades pusieron en aislamiento estricto por 14 días a 66 personas que tuvieron contacto directo con el paciente.
"Toda esa gente está en cuarentena y desde la Municipalidad los estamos asistiendo con mercadería entre otros elementos. Los ayudamos en todo lo que podemos", comentó Juan José Veléz, delegado comunal de Jaime Prats.
Cuando se confirmó que Echeverría portaba en Covid-19, la histeria inundó el poblado porque más de uno estuvo de compra en el almacén que tenía en su casa el enfermo y Jaime Prats se convirtió prácticamente en un pueblo fantasma.
"La gente estaba asustada y los primeros días estuvo todo cerrado, no había donde comprar nada. Por suerte la gente se fue calmando y de a poco vuelven a hacer vida normal, dentro de lo que se puede. Los negocios están abriendo otra vez y todos están cumpliendo con los cuidados necesarios", dijo el delegado municipal a diario Los Andes.
Asimismo el funcionario transmitió tranquilidad y aseguró que las 66 personas que están asiladas "están todos perfectos, los voy a visitar seguido y hasta ahora, nadie tiene nada".
El poblado rural tiene unos 2.600 habitantes y se encuentra emplazado a 75 kilómetros de San Rafael ciudad y a 15 kilómetros de General Alvear.
