Tras surfear varias crisis a lo largo del año pasado, la motopartista Motomel cerrará por vacaciones desde este lunes y por 15 días. Entre los empleados corrían rumores de despidos, pero Fabián Gigli, secretario de Prensa de la UOM, salió a desmentirlo.
El gremialista confió que “no atraviesa una situación distinta a la del resto de las industrias de motos" y las ventas no repuntan pese al verano.
El miércoles pasado se concretó una reunión entre los delegados y los dueños de la firma y no se habló de despidos. "Tampoco se descarta. Nosotros tratamos de buscar una alternativa, pero todo va a depender de lo que pase con las ventas en las próximas dos semanas", refirió Gigli. A partir del 14 y hasta el 28 sólo permanecerán activos los sectores de mantenimiento y logística.
Para la vuelta está prevista una nueva reunión con el objetivo de trazar el camino los próximos meses. "Siempre estamos buscando alternativas para que no quede gente afuera. De hecho, preferimos antes que los despidos, las suspensiones", dijo. Ya en mayo la empresa se desprendió de unos 130 operarios y otros 80 aceptaron el retiro voluntario. Pero si las previsiones no mejoran, el reajuste sería inminente.
De hecho, el patentamiento de motos cero kilómetro finalizó 2018 con 582.942 unidades, lo que representó una caída del 16,5% respecto de los 698.709 vehículos registrados en 2017, de acuerdo con el relevamiento de la Cámara de Fabricantes de Motovehículos (Cafam).