El conflicto se inició hace una semana cuando siete operarios de la metalúrgica villense Laminados Industriales (ex Chapa Naval) recibieron el telegrama de despido luego de reclamar por mejoras salariales y negarse a cumplir con las horas extras. Se paralizó la planta y finalmente este lunes se llegó a un acuerdo para su reincorporación.
Desde el gremio exigen una recomposición salarial de hasta un 60% para las categorías más bajas, con sueldos que hoy están comprendidos entre los $17 mil y los $20 mil. La empresa se había comprometido a presentar una nueva oferta salarial, pero no convenció y se reavivó la tensión entre las partes.
"La oferta fue insuficiente, así que estamos debatiendo los pasos a seguir", confirmó el delegado gremial Matías Garfagnoli en contacto con Vía San Nicolás, una vez finalizada la audiencia en el Ministerio de Trabajo.
"Hoy viernes va a haber una votación clave con los tres turnos para saber cómo sigue la lucha", adelantó, respecto del cónclave que será crucial para definir los destinos de la metalúrgica. Garfagnoli remarcó siempre el apoyo de la Unión Obrera de Villa Constitución y "de los compañeros de Acindar".
"La unión y la confianza que hay entre nosotros es lo que va a ayudar a que se destrabe este conflicto", puntualizó, pudiendo haber definiciones cerca del mediodía. La situación de la industria no está ajena a los vaivenes de la economía y, de hecho, a raíz de una pronunciada caída en la producción, hubo suspensiones durante los meses de enero y febrero.