Un nuevo caso de abuso infantil, de los tantos que muchas veces no ven la luz, se produjo en la zona sur de nuestra ciudad. Una mujer denunció a su propio sobrino de 16 años por someter a diferentes vejaciones a su nieto de 7.
Según consta en la denuncia, la abuela fue alertada por una sobrina que presenció la aberrante escena. Cuando la joven, de 14 años, ingresó a la casa se encontró con el adolescente con los pantalones bajos penetrando al niño.
El descargo fue realizado en sede de la Comisaría de la Mujer y la Familia el pasado 27 de agosto, aunque los abusos se venían perpetrando con anterioridad. Tanto denunciado como denunciante viven en el mismo barrio.
Según esgrime Prensa Libre SN, la madre de la criatura fue advertida por la abuela pero no le creyó y la trató de loca. De acuerdo a lo relatado, el niño también daba indicios al decir que era agredido cuando iba a jugar de una tía.