No la dejaron entrar a una comisaría por como estaba vestida

Tenía puesto un vestido y sandalias. No pudo hacer el trámite porque su ropa no se ajustaba al "código de vestimenta". Fue en San Luis.

No la dejaron entrar a una comisaría por como estaba vestida
El cartel pegado en mesa de entrada de la Jefatura Policial de San Luis\u002E

En pleno siglo XXI es difícil creer lo que le pasó a Florencia en la Jefatura de la Policía de San Luis. Fue a realizar un trámite pero no la dejaron entrar por que estaba de vestido y sandalias; y, según las autoridades, no se ajustaba al "código de vestimenta". Realizó la denuncia ante el INADI.

La chica fue a realizar los trámites para renovar el registro. Ese día en la capital puntana el termómetro llegaba a los 40 grados. Y como hacía tanto calor decidió ponerse un vestido y sandalias; sin saber que iba a ser discriminada por su vestimenta.

El cartel pegado en mesa de entrada de la Jefatura Policial de San Luis.
El cartel pegado en mesa de entrada de la Jefatura Policial de San Luis.

"Te parece que venga la gente desnuda a hacer un trámite", le dijo una de las empleadas a Florencia cuando preguntó por qué no la podía atender.

"No puedo creer lo que me pasó. Hacía tanto calor que uno se viste para estar un poco fresco. Pero para los policías y civiles que trabajan en el lugar mi vestimenta era inapropiada. Además, me dijeron que a las iglesias uno no entra así vestido", relató la víctima en diálogo con TN y La Gente.

Incluso hay un cartel que pegado en el escritorio de mesa de entrada que dice: "Prohibido el ingreso a toda persona (policía y/o civil) con vestimenta inapropiada". Y detalla la ropa que no se puede usar: "Short, pollera corta, musculosa, gorra, ojotas". Y escrito a mano agregaron: "Pollera, bermuda, crocks (sic), pantalón corto".

Incluso, lamentablemente, Florencia no fue la única discriminada. Mientras ella estaba en el lugar pudo grabar a un hombre con bermudas que se acercaba a la mesa de entradas a preguntar algo y lo mandaron a leer el cartel que está pegado en el escritorio. Como no lo atendieron, se dio media vuelta y se fue.