El miércoles al mediodía José fue a la reconocida cadena Red Megatone, de San Luis, a reclamar por un caloventor que había comprado el día anterior, pero cuando lo llevó a su casa no funcionaba. Ante la queja le dijeron que podían hacerle una nota de crédito, pero en el papel figuraba que le querían cobrar por la garantía del caloventor roto y por el nuevo. Al no aceptar, el gerente de la empresa y cuatro empleados le pegaron hasta dejarlo inconsciente. Ahoa está internado en una clínica privada de la capital puntana.
José nunca se imaginó que el deseo de estar más calentito en su casa con un caloventor lo iba a dejar todo golpeado e internado. "Compré unos productos en Red Megatone y a llevarlos a mi casa uno no funcionaba (el caloventor), por lo que al otro día lo fui a devolver. como no tenían para darme otro decidieron que me iban a hacer una nota de crédito. El aparato tenía garantía, pero me dijeron que me lo daban sin garantía y cuando me dan para firmar figuraba que me lo querían cobrar" relató el cliente golpeado y se quejó: "Si no tenía repuesto para vendérmelo, no lo quería. Ellos me lo querían cobrar si o si".
"Me enojé mucho, al otro día me llamaron y me dijeron que me estaban cobrando el equipo completo más el que había devuelto, entonces volví a la sucursal a quejarme y me dijeron que ya me habían dado la nota de crédito, pero el que yo había devuelto ese día me lo cobraban" explicó incrédulo.
La cajera lo mandó a hablar con el vendedor, el vendedor con el gerente y según José: "Él muy soberbio me dijo que eran las políticas de la empresa, que me hacían una nota de crédito y que no me lo podían solucionar. Yo estaba muy enojado y me dijo que el equipo lo tenía que pagar igual. Se dio media vuelta y se fue, yo quise agarrarlo y se puso en guardia, como para pelear, pero la cajera que estaba al lado me tiro una abrochadora, ese golpe me distrajo y después sentí que alguien venía corriendo por atrás mio, yo pensé que era a separarnos, pero me dio una piña en la nuca, y ahí el gerente aprovechó para pegarme. Después apareció otro empleado, y yo solo me cubría la cabeza, luego apareció otro más. ¡Me estaban pegando entre cuatro!" describió anonadado José e indicó que ya en el piso aún no dejaban de golpearlo, "me dieron un puntapié en la cabeza, otro en la espalda y lo único que intentaba era cubrirme la cabeza, por un momento me desvanecí, pero me seguían pateando" aseguró el hombre en una entrevista al periodista Daniel Rodríguez.
Lo insólito de la gresca es que se dio frente a todos los clientes, en el salón de ventas. "Dejaron de pegarme cuando dos empleados lograron separarlos, uno de ellos me alzó y me ayudo a salir del local. En ese momento llamé a la policía e hice la denuncia" reveló el hombre, pero explicó que el problema apareció 22 horas después, cuando debido a la cantidad de golpes, "me desmayé y perdí el conocimiento, por lo que me tuvieron que internar".
"Yo no los conozco, solo fui a reclamar el caloventor y salí así. Lo único que me queda es que la policía actúe rápido y vean lo que hay en las cámaras de seguridad" concluyó.
