Una nena de 7 años que reside en un hogar del Estado se animó a contar que fue abusada por su tío, que en realidad no es pariente de ella sino un amigo cercano a la familia. Ante esta situación, la jueza de Garantías Gema Guerrero concedió este último martes a la Fiscalía un plazo de 6 meses para que se investigue el presunto abuso sexual cometido contra la menor.
El principal sospechoso fue detenido el viernes pasado, pero recuperó la libertad este último martes. Algunas versiones indicaron que se trata del padrino de la niña. Las fuentes judiciales confirmaron que es metalúrgico, mecánico y cartonero de unos 50 años de edad y que vive en Rawson.
Este hombre está siendo asistido por el abogado Gustavo De la Fuente y declaró ante la jueza, negando los hechos que le endilgó la fiscal de la UFI ANIVI Ingrid Schott, quien estuvo acompañada por la ayudante fiscal Paula Arredondo. La Fiscalía había pedido que se lo dejara preso por un plazo de 6 meses, pero la jueza Guerrero hizo lugar al planteo de la defensa y lo dejó en libertad bajo algunas medidas como son: ser monitoreado a través de un dispositivo electrónico y una prohibición de acercamiento. Además, el sujeto se comprometió a someterse al proceso y a no entorpecer la investigación.
Por el lado de la víctima, se trata de una menor que no tiene a su madre y que antes había estado bajo la guarda de una tía. Posteriormente, pasó a ese hogar del Estado en donde está ahora y se animó a contar que había sido abusada. Se espera que los investigadores tengan detalles de esos presuntos abusos en los próximos días, cuando se realice una audiencia videograbada, comúnmente conocida como Cámara Gesell.
Por su lado, el abogado defensor De la Fuente aseveró que existe un informe de un médico legista, quien constató que la menor no presenta lesiones o signos en sus partes íntimas compatibles con los de un abuso sexual. Este delito, que le imputan provisoriamente al sospechoso, es el de abuso sexual gravemente ultrajante.
