Sigue la polémica en San Juan por el proyecto que hace mención a la eutanasia para perros callejeros. Esta ordenanza fue ingresada por el intendente de la localidad de Ullum, Leopoldo Soler, y generó gran controversia en la provincia. Si bien los concejales del departamento se comprometieron a eliminar el proyecto durante la sesión del jueves, las proteccionistas de animales salieron al cruce de los funcionarios y manifestaron que la muerte asistida para perros sigue vigente.
Emilia Merino, quien encabeza la ONG Sala de Emergencia para perros, manifestó que el proyecto se pasó a Comisión y que si hubieran eliminado el punto en cuestión, “directamente hubiese pasado a un cuarto intermedio, cosa que no pasó”. “Si se hubiera eliminado el punto 7 como lo pidió la concejal Daniela Salina, directamente todos hubieran apoyado esa moción y hubiera pasado a un cuarto intermedio todo el resto del proyecto”, agregó Merino.
Este viernes, Día del Animal, las proteccionistas se hicieron presentes en la puerta del municipio para reclamar por la no aprobación del polémico proyecto. “Hicimos la convocatoria masiva, con unos 10 autos, llegamos con las bocinas en caravana al municipio la policía nos tenía reservado el lugar donde íbamos a estacionar, lo hicimos correctamente y nos bajamos”, relató.
Sin embargo, en medio de la convocatoria, pidieron hablar con algún funcionario de Ullum y terminaron “maltratadas”. “Le presentamos el petitorio, que lo tomó y lo tiró sobre la mesa y nos dijo que no iba a firmar nada hasta que su abogado no lo viera”, acto seguido, la letrada que acompañaba a Merino la explicó a Alfredo Jofré, secretario de Gobierno, que lo que querían es que se elimine el punto 7 y llegar a un acuerdo. A lo que el secretario respondió con una seña, chasqueando los dedos. “Nos echó”, dijo Merino.
La proteccionista denunció públicamente a los funcionarios de Ullum y aseguró que contrataron gente para que apedrearan sus autos. “Tenemos las capturas de pantalla que las hemos subido. Gracias a Dios no han podido romper ningún auto, en el caso mío lo han rallado, con una punta el capó”, expresó Merino.