En los últimos años se vive en Argentina y en el mundo una especie de “resurgir” del “gin tonic”, un cóctel que existe desde hace décadas pero que viene gozando cada vez de más popularidad. En este marco, así como hace algunos años hubo un “boom” de las cervezas artesanales, se vive el momento de los gines artesanales y una pareja de sanjuaninos lanzó un particular destilado de este tipo llamado Perséfone cuyo color turquesa intenso destaca por sobre el resto.
Laura Bilbao y Sergio Sisterna son un matrimonio que apostó a la fabricación artesanal de gin, con notas propias y auténticas que impactaron a los clientes.
Según explicó Sergio a Diario la Provincia SJ, “el proyecto surgió luego de querer extender nuestra cervecería “Cervero” hacia otro rumbo. Llegar a más clientes y además, poder suplir la demanda de gin que nos pedían. Perséfone, nuestra destilería artesanal y Cervero Cerveza Artesanal empezó a crecer, con resultados muy buenos”.
Además, el emprendedor destacó que “elegimos elaborar esta bebida ya que veíamos un mercado muy fructuoso; que podíamos avanzar por este camino del gin desarrollando y mejorando, haciendo de nuestro elixir, una bebida concurrente de agrado en nuestros clientes”.
Sobre el proceso de elaboración de esta bebida, indicó que tiene tiempos relativamente breves, por eso ya lanzaron al mercado su segunda producción y sus clientes agotaron rápidamente esta partida. Las etapas básicas son tres: macerado de botánicos, destilado y embotellado.
“Los tiempos de elaboración constan de 5 días de macerado, más 3 o 4 horas de destilación del mismo. O sea que nuestra producción se completa en 6 días. Llevamos más de 80 litros de producción total, un orgullo para nuestra familia”, explicó, y luego agregó: “El envasado se realiza en botellas fraccionadas de 1 litro, seleccionadas y etiquetadas con nuestro logo, con un sutil poema describiendo nuestra bebida”.
“La promocionamos en nuestras redes sociales; con amigos conocidos y clientes de nuestra cerveza. Gustó, se aceptó y seguimos hacia adelante. Agradó mucho y recibimos muy buenos comentarios y críticas, también ya que es la idea seguir mejorando nuestra producción, calidad y procesos”, agregó.
Además, Sergio sostuvo que “nuestra marca se está haciendo conocida y cada vez más personas prueban y compran Perséfone. Queremos que sea distintiva, única, y con un sabor y aroma inigualable. Empezamos con un sueño parcial, y ahora es una realidad palpable. Somos emprendedores natos y nos gusta innovar. Es nuestra necesidad priorizar la normalización de nuestro producto y pronto etiquetado del mismo”.
Por último, cerró: “Queremos que nuestra pequeña destilería se haga gigante, sin perder la base de nuestro sueño. Somos Perséfone, somos Cervero y nuestra producción es netamente sanjuanina, artesanal y familiar”.