Alexis Javier Juárez es el bombero voluntario de Pocito que cayó de una camioneta cuando iba a apagar un incendio con sus colegas el pasado miércoles 6 de julio. Ese mismo día, el viento Zonda hizo estragos por toda la provincia y las llamas no dieron tregua en la localidad de Carpintería. Cinco días más tarde, este hombre de 46 años recibió el alta médica y ya piensa recuperarse y volver rápido a sus funciones.
El primer lugar al que fue tras recibir el alta médica fue el cuartel de Bomberos Voluntarios de Pocito. Allí fue recibido por sus compañeros. En diálogo con Diario La Provincia SJ, Alexis contó que le “falla una pierna” pero que viene “caminando bien”. Además, aseguró que lo tienen “que ayudar” pero que de igual manera va bien.
Al ser consultado sobre los recuerdos de lo que ocurrió durante la tarde del accidente, sólo recordó los minutos previos y que luego despertó en el hospital Rawson: “No me acuerdo de nada. Sé que estábamos en una casa con unos compañeros, ahí salimos, me subí atrás de la camioneta y luego no recuerdo más. No me acuerdo ni cuando me subieron a la ambulancia o quien estaba al lado mío”, relató.
Sus compañeros lo ayudaron a reconstruir la historia completa. Ese día, él iba en la camioneta y a su lado estaba el jefe del equipo, Agustín Moya, y del otro lado una compañera. Cuando el vehículo ingresó en la columna de humo del incendio, Juárez perdió el equilibrio y cayó, pero sus colegas se dieron cuenta unos metros más adelante y por eso retornaron a buscarlo. Cuando lo encontraron, estaba malherido entonces lo llevaron inmediatamente al nosocomio.
En el hospital Rawson fue operado de urgencia por una herida en la cabeza y, si bien desde un principio se sabía que la operación era riesgosa y que le podían quedar secuelas, salió de manera exitosa. “La mayoría de acá, de mis compañeros, estuvieron orando por mí. Ha sido grande la cadena de oración. Hay una pierna que no puedo afirmar bien pero más allá de eso estoy mejor”, contó Alexis.
Este bombero forma parte de este equipo de voluntarios desde hace 4 años, pero además es jardinero y mecánico, actividades que realiza para poder vivir. “A bomberos voy a volver porque es una pasión que tiene uno adentro. Acá me han dado mucho apoyo todos los compañeros. Pero sé que no será ahora y que me va a costar”, contó.
Él vive en una vivienda muy precaria en zona de la Calle 11 al oeste de calle Mendoza, en Pocito. Su jefe en Bomberos Voluntarios de ese departamento llamó a la solidaridad para poder ayudarlo con todo lo que se pueda: “Necesitamos que él tenga una pensión, una ayuda. Tiene una hernia de disco pero no recibe pensión. A pesar de todo, él trabaja en Bomberos como cualquier otra persona y pone toda su voluntad para ayudar al prójimo”, contó. Además, pidieron donaciones como una cama, colchón, colchas, ropa y calzado para mejorar su situación.