En San Juan, el órgano que controla el gasto público encontró presuntas irregularidades en el manejo de los fondos del departamento Angaco. Según publicó el periodista Juan Facundo Olivera en Diario de Cuyo, hay seis puntos del balance del año 2017 que sumados entre sí representan un vacío en las arcas de poco más de 3 millones de pesos. Ahora los funcionarios que representan al municipio deberán justificar los faltantes con documentación o, de no hacerlo, deberán solventarlo de su bolsillo.
El gasto injustificado más relevante corresponde al pago, por arriba de lo tasado, de unos terrenos expropiados para el programa "Mi Lugar en el Mundo". En ese ítem la suma asciende a 2.244.900 pesos y en la mira se encuentra el intendente José Castro, el secretario de Hacienda, el contador, el tesorero y los cinco concejales: José Risueño, Sandra Escuela, Valeria Garay, Alberto Fernández y Mario Pacheco. Es que a uno de los inmuebles el órgano tasador lo valuó en 616.200 pesos y el Concejo Deliberantes autorizó y habilitó al Ejecutivo a pagarlo en 1.000.000 pesos.
En la investigación que lleva adelante el Tribunal de Cuentas también figuran viáticos y viajes no rendidos con sus respectivos comprobantes, falta de certificación de tareas realizadas en obras municipales y de comprobantes por el pago de servicios.
La otra presunta anomalía tiene que ver con los fondos que fueron distribuidos para la obra de remodelación de la plaza departamental. Según el diario local, el municipio recibió 4 millones de pesos de la provincia y apenas gastó 1.545.642 pesos. Fuentes calificadas señalaron que a la comuna le quedó un saldo de 1.638.007, por lo que hay una diferencia de 816.349 pesos que no están justificados.