La Justicia visitó la casa donde una sanjuanina mató a su marido

Los jueces, el fiscal y los abogados recorrieron la vivienda. Aún hay sangre en la vereda.  

En la casa aún hay manchas de sangre.
En la casa aún hay manchas de sangre.

En el segundo día del juicio a Claudia Moya, los representantes de la Justicia que intervienen en la causa realizaron una inspección ocular en el lugar en el que, en junio de 2017, Claudia Moya mató de un puntazo en el corazón a su pareja y padre de su hija, Alfredo Turcumán. A un año de la tragedia, aún hay sangre del difunto en la vereda.

Eran cerca de las 9:30 cuando los integrantes del tribunal que juzga a la mujer, el abogado de defensa, el querellante y los medios de comunicación, llegaron a la casa ubicada en calle Abraham Tapia al 549. Muchas cosas han cambiado desde aquella noche en la casa de la tragedia. Ahora allí funciona un almacén y por eso sólo pudieron ingresar a la misma, miembros de la Justicia y los abogados de ambas partes.

En la casa aún hay manchas de sangre.
En la casa aún hay manchas de sangre.

A pesar de todos esos cambios aún hay rastros de aquella noche fatal: en las casa linderas todavía queda sangre de Turcumán. En diálogo con Diario Huarpe, el abogado de Turcumán, Mario Padilla, contó: "Alfredo salió de su casa para pedir ayuda, por eso aún hay manchas de sangre del joven en la vivienda del vecino".

Han pasado dos días del inicio del juicio. Ahora comenzará el debate con los 28 testigos que han aportado datos a la causa y que fueron convocados tanto por el fiscal, Eduardo Mallea, la defensa a cargo de Carlos Reiloba y la querella, ejercida Mario Padilla. "El juicio sigue con la declaración de los testigos e ir probando cada parte lo que se va diciendo", finalizó Padilla.

El juicio contra Claudia Moya comenzó el 25 de julio. La mujer llegó llorando ante el juez y antes de sentarse en el banquillo de los acusados aseguró ante la prensa que es inocente y que era víctima de violencia.