El bolichero Martín Herrera fue condenado a 8 años de prisión por abusar sexualmente de una joven en abril del 2016. El sujeto se hizo conocido en Tribunales por entrar sonriendo. Agrupaciones feministas hicieron guardia en la puerta del edificio de calle Rivadavia para pedir una condena ejemplificadora sobre el sujeto. Al conocer la sentencia, se mostraron en general satisfechas.
La Sala I de la Cámara Penal decidió condenar a Herrera por abuso sexual. El juicio comenzó el 27 de abril pasado. El hecho por el que condenaron a Herrera sucedió en abril del 2016. La víctima entró al bar L'ovella, ubicado en el Lateral de Circunvalación entre Ignacio de la Roza y Avenida Libertador, junto a una pareja amiga.
Según publicó Tiempo de San Juan, dentro del local la pareja y la joven pidieron una cerveza cuando llegó Herrera, quien era el propietario del lugar. La joven comenzó a charlar con él hasta que sacó un sobre de la billetera con un polvo blanco, que aparentemente era cocaína. La chica comenzó a sentirse mal, decidió ir al baño y se desvaneció. Las sospechas indican que allí Herrera abusó de la víctima, que al recuperar el conocimiento tenía la ropa baja.
