Como respuesta a la llegada de la segunda ola de coronavirus al país, el presidente Alberto Fernández anunció el miércoles una serie de medidas que se aplicarán en las provincias que están en alerta roja por el crecimiento de casos. Si bien en Salta el riesgo epidemiológico es todavía bajo, el COE provincial se reunirá este jueves, a las 14, para definir los pasos a seguir pero su titular, Francisco Aguilar, anticipó que habrá algunas restricciones.
En primer lugar, el referente del Comité Operativo de Emergencias, aclaró que la prioridad será no perjudicar la actividad comercial ni tampoco el dictado de clases. “Algún freno vamos a tener que poner, generando el menor daño posible en la economía y en la educación”, anticipó. También remarcó que todavía no se restringirá la circulación hasta las 23 porque la situación de Salta es diferente a la de AMBA.
Desde el 1 de marzo, los establecimientos educativos vienen trabajando con un sistema bimodal, es decir que una parte de los contenidos se dictan en la presencialidad, y otra parte en las plataformas virtuales. Al respecto, Aguilar sostuvo que la idea es mantener las clases más que se pueda. “Los chicos tienen riesgo muy bajo de que el COVID-19 les cause problemas pero pueden llevar la enfermedad a la casa y ahí puede ser un problema. Dejar los chicos sin educación durante un año es algo muy grave”.
Con respecto a la actividad gastronómica también explicó que el riesgo de contagios en este ámbito es baja pero observó que algunos locales no cumplen con el protocolo biosanitario. Algo similar remarcó que sucede en los gimnasios. Finalmente, también aclaró que por ahora no está previsto restringir el transporte de mediana y larga distancia. “No se demostró que el colectivo ni el avión sean lugares de grandes contagios. Por ahora se desarrolla con normalidad”, concluyó.