El puente internacional que une Bolivia con Argentina sobre el río Bermejo está cerrado desde el año pasado, por lo que los responsables de gomones que cruzan el río desde la ciudad homónima y Aguas Blancas buscan siempre alternativas para seguir pasando mercaderías y personas. Se trata de una problemática repetida, puesto que en los primeros días del mes pasado crearon una plataforma improvisada de tres metros de ancho por la cual cobraban entre $ 50 y $ 100 por persona.
El martes, los boteros que trasladan mercadería en sus barcas artesanales intentaron volver a instalar un puente armado con gomones, pero la Fuerza Naval de Bolivia los reprimió y prohibió seguir trabajando. El armado de este puente pretendía cobrar $ 50 argentinos para que cruce la gente, como única alternativa para competir con el servicio de las chalanas.
La medida obedece a una serie de controles y patrullajes para desalojar las actividades ilegales en la zona del río Bermejo, similar a la acción que llevan a cabo desde Gendarmería Argentina. A pesar de distintas advertencias, los gomoneros continúan intentando cruzar de manera ilegal, lo que significa un gran riesgo para quienes intenten atravesar las aguas. Por otra parte, los trabajadores de frontera que no pueden continuar sus actividades por la prohibición, amenazaron con bloquear la Av. Petrolera si no se les permite volver en las próximas horas.