Rocío González, la joven de 26 años que fue asesinada por su novio Ezequiel Mendoza, tenía dos hijos y vivía para mantenerlos. El día de femicidio había salido de su casa para ir trabajar pero nunca llegó, tampoco regresó con su familia. Horas más tarde la encontraron asesinada junto al cuerpo de su pareja, quien se quitó la vida.
El hecho ocurrió en el barrio Solís Pizarro, en Salta capital, y desató un enfrentamiento entre la familia Rocío y la de Ezequiel. La hermana de la joven contó que los familiares de Ezequiel sabían que él era violento, y siempre lo protegieron. También reveló que ella había intentado dejar a su novio en repetidas oportunidades pero él la hostigaba. La principal hipótesis sostiene que el joven golpeó a la mujer hasta dejarla sin fuerzas, la ahorcó y después se quitó la vida.
Tras el femicidio, la responsable del programa de Orientación y Asistencia Jurídica a Víctimas Delitos Graves, Carla Tiano, visitó a la familia de la víctima y se puso a disposición para ayudarla en especial a los dos pequeños que quedaron sin mamá, según detalló FM Profesional. En el transcurso de los días se iniciarán trámites sociales correspondientes para que los menores puedan atravesar esta situación tan dolorosa de un modo que se sientan más contenidos y acompañados.
Cabe destacar que el Programa de Orientación y Asistencia Jurídica a Víctimas acompaña a víctimas y familiares de víctimas, brindando orientación y acompañamiento durante el transcurso del proceso judicial y con posterioridad, ofreciendo la asistencia necesaria a través de diferentes organismos públicos.