Conductores de vehículos reclamaron que durante el fin de semana y en distintos puntos de la ciudad y alrededores realizaron controles de alcoholemia sin ningún tipo de resguardo para los policías y los automotores.
Denunciaron que los efectivos requerían a soplar el aparato del alcoholímetro sin boquilla ni pipeta. Si bien se entiende que en tiempos de pandemia, los controles de tránsito se deben mantener, y que en la provincia rige la tolerancia cero para las personas que hayan bebido antes de conducir, es importante que todo sea realice bajo las normas de higiene y bioseguridad establecidas por el protocolo.
La situación se dio en la ruta provincial 36, entre Rosario de Lerma y Campo Quijano, también en el camino al municipio de Coronel Moldes y en el trayecto de Castellanos que une a San Lorenzo con la zona norte de la ciudad.