La vuelta a clase sigue en análisis aunque con avances. Funcionarios del Ministerio de Educación de la provincia se reunieron con gremios para establecer el protocolo del regreso a las aulas.
Se estudia la posibilidad que los estudiantes de séptimo grado y quinto año retomen las clases presenciales después de las vacaciones de invierno, a finales de julio. También volverían los alumnos de escuelas rurales.
El ingreso de los chicos a las escuelas y colegios no sería en el mismo horario sino en grupos reducidos cada cinco minutos. Tampoco habría formación de entrar y todas deberán pasar por un sistema de limpieza general, con lavandina y alcohol en gel.
La distancia entre bancos sería de un metro y medio hacia adelante, atrás y ambos costados. Habría grupos de hasta 10 alumnos por aula y se baraja la alternativa de que tengan clases en semanas intercaladas. En los recreos no se abrirán lo quioscos de las escuelas, por lo que los estudiantes deberán llevar para consumir.
Por otro lado, Educación trabaja en los contenidos prioritarios que se irían repitiendo hasta completar los circuitos y volver a dictarse un tema nuevo.