Cálculos oficiales y fuentes religiosas estimaron una concentración de más de 850 mil personas en el centro de la ciudad de Salta durante la procesión del Milagro, que tuvo lugar el domingo pasadas las 15, donde se vieron miles de peregrinos provenientes de los lugares más recónditos de la provincia, acompañando las imágenes del Señor y la Virgen del Milagro.
El Milagro en Salta es una de las fiestas religiosas más importantes del país, donde miles de fieles llegan a Salta para renovar su pacto de Fidelidad al Señor y la Virgen del Milagro, y ayer, con una agobiante temperatura de 35ºC, los feligreses acompañaron las imágenes bajo el lema "Caminemos juntos, como Iglesia peregrina, hacia adelante".
Además de los 80 mil peregrinos, sumados a los cientos de miles de feligreses, las autoridades de la provincia acompañaron la procesión, entre ellos el gobernador Juan Manuel Urtubey y su mujer, Isabel Macedo; el intendente capitalino, Gustavo Sáenz, y otros ministros, legisladores, y secretarios provinciales.
Durante la mañana, el festejo contó con la participación del presidente de la Nación, Mauricio Macri y su mujer, Juliana Awada, quienes estuvieron presentes durante el cierre del Triduo, en una misa en que el arzobispo de Salta, Monseñor Cargnello, llamó a ponerle "cara" a los pobres: "Esto que digo vale para todos y para todo lo que se juega en el mundo de la política. Los pobres no son una molestia. Son una oportunidad. Los pobres son maestros que nos enseñan," dijo la máxima autoridad de la Iglesia en Salta durante la homilía.