Luego que revivieran la investigación del asesinato de Jimena Salas, ocurrido en enero de 2017, y los escandalosos cambios y recambios de fiscales a cargo, surgieron nuevos elementos de la investigación que complican al vendedor ambulante Horacio Sergio Vargas.
El hombre de 34 años se encuentra imputado por presunta comisión del delito de supuesto homicidio calificado por ensañamiento, alevosía y por precio o promesa remuneratoria, en calidad de partícipe secundario en perjuicio de la joven madre.
Los nuevos elementos surgieron en las últimas horas a partir del análisis del teléfono del acusado, en el cual se prestó especial atención las llamadas que realizó y recibió el 27 de enero de 2017.
A esto, se sumó que un testigo ubicó al imputado frente al portón de la víctima en el día del asesinato, que reforzaría la teoría que Vargas hizo de "campana" para que los autores materiales del crimen pudieran llevar a cabo su cometido.
La fiscal Inés Salinas Odorisio advirtió que la situación de imputado cambió ante estos nuevos elementos, y advirtió sobre el peligro que significaría para la investigación dejar a Vargas en libertad, pidiendo que se mantenga la prisión preventiva.
El juez del Tribunal de Impugnación, Eduardo Barrionuevo, deberá considerar el recurso de apelación realizado por la defensa del acusado en la luz de las nuevas pruebas en su contra.