Rosario amplía 33% su capacidad para el tratamiento de residuos

Inauguraron una nueva planta de separación y reciclaje que permite procesar 50 toneladas diarias.

Rosario amplía 33% su capacidad para el tratamiento de residuos
En el establecimiento trabajan recolectores urbanos que formaron una cooperativa.

La Municipalidad de Rosario inauguró este jueves una planta para residuos reciclables. De esta manera se amplía 33% la capacidad de tratamiento de la basura a nivel local dentro del predio que funciona el extremo sudoeste de la ciudad.

//Mirá también: Donaron más de 3 toneladas y media de ropa para personas en situación de calle

Desde la Secretaría de Ambiente y Espacio Público precisaron que en las instalaciones se pueden procesar hasta 50 toneladas diarias. Ese volumen se suma a los 150.000 kilos que recibe cada día el personal del centro de compostaje “Bella Vista”.

El titular de la cartera, Diego Leone, destacó que la iniciativa permite darle empleo a más de 40 personas que se dedicaban a la recolección informal en la calle. En esta nueva instancia formaron cooperativas para trabajar juntas cerca del límite con Pérez.

//Mirá también: Un proyecto de agricultura urbana en Rosario fue premiado con 250.000 dólares

Además de promover la inclusión social, el funcionario aseguró que el Centro Ambiental de Tratamiento de Residuos sumó una “planta modelo en la región” gracias a la tecnología instalada. De esta forma, la Municipalidad cuenta con mayor capacidad para reducir los residuos urbano”.

Reciclar, reducir y reutilizar

Leone sostuvo que la inauguración es un paso más en busca de “disminuir el entierro de materiales y mejorar el reciclaje”, entre otras cuestiones. Al respecto, aseguró que el 60% de la ciudad ya cuenta con la infraestructura necesaria para la separación de la basura.

La planta permite compactar y reutilizar el material que se descarta en bolsas.
La planta permite compactar y reutilizar el material que se descarta en bolsas.

Durante la inauguración, las autoridades detallaron que las máquinas permiten hacer una primera separación de las bolsas que se reciben en la planta. A partir de allí, los trabajadores continúan con el acopio y selección según el tipo de material, ya sean vidrios, latas o papeles.

Además de la compactación en fardos, el proceso permite la comercialización de una parte de lo que se recupera en la medida en que los residuos estén en condiciones.