A medida que excavan el piso del Museo Estevez van apareciendo rastros de los orígenes de Rosario, como las distintas trazas, los ladrillos utilizados e históricos fragmentos de cerámicos que dan una idea de cómo era antiguamente la ciudad que nunca fue fundada. El objetivo de los trabajos es poner en valor el Museo de Arte Decorativo Firma y Odilo Estevez.
El secretario de Cultura, Dante Taparelli, valoró: “Esta casona es una joya patrimonial de la ciudad. Ahora tenemos tres museos en uno y esto es maravilloso” y agregó: “Al encontrar los pozos de agua, aparecieron los primeros vestigios de civilización en un terreno virgen, tenemos el origen genuino de la ciudad, con las distintas trazas, los distintos tipos de ladrillos”, dijo.
“Creo que una casa tan significativa como ésta pone en escena la generosidad de una familia, que ha vivido muy bien y en los últimos momentos de su vida deciden que todo lo que acumularon pase a ser patrimonio público para que la gente se eduque en el futuro, en el gusto, en la historia, en la materialidad, habla de la ciudad que debemos tener, a la que debemos apuntar”. Asimismo, el secretario mencionó que se está evaluando de qué manera podrán coexistir este descubrimiento con la muestra del patrimonio del Museo en diferentes exhibiciones.
Por su parte, Analía García, directora del Museo, expresó: “Aparece ahora la historia de los comienzos de la ciudad porque la casona de Santa Fe 738 está en plena referencia con la historia de la ciudad. Esta casa museo tiene un historial que dialoga en las diferentes convergencias de la casona con la historia de la ciudad. Esto nos permite historiar desde la familia Estevez a tiempos coloniales”, manifestó y remarcó: “Este sitio apela y nos interpela en un concepto maravilloso que es la memoria. Nos permite encontrarnos con la memoria de Rosario”.
Entre los elementos encontrados en el lugar figuran vestigios de materiales de construcción anteriores al edificio de los Estevez, el brocal del aljibe, albañales, resto de estructuras, que probablemente sean de columnas, fragmentos de cerámica arqueológica Chaná, más otros que están bajo el estudio de los equipos de la Universidad Nacional de Rosario (UNR).