El frío del otoño se retiró definitivamente de Rosario, al menos hasta el fin de semana. Este jueves comenzó con niebla en algunos sectores de la región y el pronóstico incluye una máxima de 30 grados, aunque se prevé un aumento de las temperaturas mínimas hasta el domingo.
La ciudad amaneció con neblina, cielo despejado y 98 % de humedad. La Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) advirtió sobre visibilidad reducida en algunos sectores de las rutas del sur santafesino, por lo que recomendaron circular con precaución.
El pronóstico para Rosario anuncia una tarde calurosa con algunas nubes y viento desde el nordeste. Las máximas probables entre el viernes y el sábado son similares, aunque las mañanas ya no serán tan frescas.
Según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), no hay lluvias en el horizonte este fin de semana. Recién el lunes a la tarde se espera que caigan algunas gotas de la mano del descenso de temperatura en la ciudad y la región.
Después del domingo es probable que vengan días más grises. Junto con la retirada del calor, también llegarán las nubes y la máxima probable bajará hasta 20 grados el miércoles a medida que cambien las condiciones meteorológicas.
