Daniela Batlle Casas, mejor conocida como la “novia de Gerson”, se hizo viral gracias a su estilo de vida en TikTok pero también tuvo una destacada aparición televisiva e incursionó en política en Santa Fe, ciudad donde nació, creció y se recibió de abogada.
En septiembre de 2021 participó del programa Los 8 escalones del millón, conducido por Guido Kaczka. Contestó correctamente una pregunta sobre la capacidad de la sala principal del Teatro Colón: respondió 2.500, y la cifra oficial es 2.478, lo que le valió el premio de 1 millón de pesos.

Dejó registro de ese logro en su cuenta de Instagram donde contó su experiencia: “Obviamente no me imaginaba ni un cuarto de lo que iba a pasar ese día de grabación.. era muy difícil llegar a la final y mucho más ganar. Pero ahí estuve.. y por fortuna, suerte, casualidad o causalidad, como quieran llamarle, esta vez gané”.
En ese momento, Batlle Casas tenía 25 años, era abogada egresada de la Universidad Nacional del Litoral y jugadora de hockey en el Club Náutico El Quilla. Contó que pagó su traslado a Buenos Aires, hospedaje y costos de viaje, por lo que la ganancia implicó un cambio significativo.
Pero además, ese mismo año integró la lista de precandidatos a concejal en la agrupación “Santa Fe en Red” del frente Juntos por el Cambio, encabezada por Nicolás Rabosto en las PASO. Sin embargo, no llegó reunir la cantidad de votos necesaria para competir en las elecciones generales.

Durante la pandemia, estuvo en el centro de la polémica por participar en una fiesta clandestina en un country junto a dirigentes y empresarios, hecho que generó críticas institucionales. Aun así, defendió su trayectoria y destacó que nunca obtuvo cargos políticos electivos.

Su perfil en redes creció exponencialmente tras su victoria televisiva. Actualmente tiene casi 170 mil seguidores en TikTok y su contenido incluye viajes por Europa, consejos de belleza, deporte y su día a día junto a “Gerson”, su novio a quien en las redes los usuarios dicen que ella no ama.
En su video de descargo reciente defendió ese pasado con claridad: “Yo soy abogada y trabajé en el Congreso con Gerardo Milman… renuncié voluntariamente en octubre de 2022, antes de cualquier escándalo”, dijo sobre su paso como asesora del diputado, uno de los principales imputados por el intento de asesinato de la expresidenta Cristina Kirchner.