Este jueves por la tarde, un escalofriante crimen sucedió en una vivienda ubicada en pleno centro de Rosario. Allí, se encontró el cuerpo de un hombre mayor con elementos clavados en el cuello, acostado sobre un gran charco de sangre.
El hecho tuvo lugar en un departamento del primer piso perteneciente a un edificio de Zeballos al 1100, donde se halló sin vida a Hugo Ferrari, de 78 años y morador del lugar. Al entrar al departamento, los Policías encontraron el cadáver con dos biromes clavadas en el cuello que le habrían provocado la muerte por pérdida de sangre.
Ferrari era un ex joyero que vivía solo en la vivienda donde apareció asesinado. Según trascendió, el departamento estaba completamente revuelto y los investigadores analizan la posibilidad de que se trate de un homicidio criminis causa, para tapar un robo en la propiedad.
Los testimonios de los vecinos del joyero asesinado
Cabe destacar que el ingreso al edificio cuenta con cámara de vigilancia y un sistema de tarjeta para poder acceder. No obstante, ni la puerta del edificio ni la del departamento del fallecido aparecieron forzadas. Los testimonios de los vecinos dan cuenta de un “muchacho de un delivery” al que el hombre hizo entrar y que salió “quince minutos después”.
Otros residentes de la zona comentaron que se trataba de un hombre que “recibía mucha gente en su casa”, donde también guardaba joyas de su propia colección y no era muy reservado al respecto.
El caso quedó en manos de la fiscal de homicidios Marisol Fabbro y el gabinete criminalístico de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) peritó el departamento y las cámaras de acceso al edificio.
