Un hombre de 37 años comenzó a ser juzgado este miércoles por balear y dejar parapléjico a su amigo en la zona sur de la ciudad. La Fiscalía, representada por Florentino Malaponte, solicitó una pena de más de 10 años de prisión para el acusado, identificado como José Antonio Demarrez, por el delito de tentativa de homicido agravado por el uso de arma de fuego y también el hallazgo del revólver calibre 22 que le secuestraron al momento de la detención.
Según el fiscal Malaponte, el viernes 25 de noviembre de 2016, la víctima, Ariel A, de 21 años, se ubicaba a nueve cuadras de su vivienda, en Luzarriaga al 2400, de barrio Nuevo Alberdi.
Mientras caminaba por el lugar, el muchacho pasó frente al sospechoso, quien era su amigo. De todas maneras, Demarrez sacó un arma calibre 22 y abrió fuego. Ariel se desplomó en el lugar y fue trasladado por vecinos hasta el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
El personal médico le diagnosticó una herida de arma de fuego en la zona lumbar. A las pocas horas, el joven recibió la noticia de que había quedado parapléjico, dijo el fiscal en el inicio del proceso.
Tras el episodio, Malaponte ordenó al día siguiente una serie de medidas, entre ellas, un allanamiento a la casa del acusado, ubicada en las calles Bouchard y Servellera, a cinco cuadras de donde ocurrió el hecho.
En el domicilio arrestaron a Demarrez y además le incautaron el revólver calibre 22 junto a ocho cartuchos. Luego se constató que el arma fue la utilizada para cometer el crimen.
En la audiencia celebrada este miércoles en el Centro de Justicia Penal, el fiscal solicitó la pena de 10 años y 8 meses de prisión para Demarrez por los delitos de tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso real y la portación ilegitima del revólver que le hallaron en su vivienda.