Redujeron la condena por explotación de la prostitución para el "Indio Blanco" y su ex

El acuerdo con la Fiscalía descartó así una sanción de prisión efectiva para el ex dueño de La Rosa.

Redujeron la condena por explotación de la prostitución para el "Indio Blanco" y su ex
El cabaret fue clausurado el 25 de mayo de 2013\u002E (Rosario/12)

A más de cinco años de la clausura del cabaret La Rosa, la Justicia provincial decidió reducir la condena inicial contra los dueños de la whiskería que servía para explotar y facilitar la prostitución en Pichincha, al tiempo que absolvió a la encargada de cobrar a los clientes del bar.

La resolución surgió este martes al cabo de una audiencia de Cámara en la que la Fiscalía y la defensa oficial presentaron un acuerdo para el cumplimiento de una pena de 3 años de prisión por parte de Juan Cabrera, más conocido como el "Indio Blanco". A diferencia del fallo de primera instancia de 4 años y 6 meses, esta nueva sanción no requerirá cumplimiento efectivo.

La misma pena también fue aplicada en el caso de María Alejandra Otta, ex esposa del hombre que también estuvo a cargo del complejo Willie Dixon en esa zona de la ciudad. Según explicaron sus asesores legales, ambos estuvieron a disposición a lo largo de todo el proceso y actualmente trabajan en un emprendimiento gastronómico.

Según informó El Ciudadano, el tribunal presidido por Georgina Depetris aceptó como excepción una pena inferior al piso actual que dispone la ley, ya que la investigación se había iniciado antes de la reforma que elevó las condenas vinculadas a ese tipo de delitos. Entre los argumentos sobre la resolución, los magistrados señalaron que había que tener en cuenta "el fin resocializador" de la sanción.

El allanamiento realizado el 25 de mayo de 2013 en el lugar que explotaba el "Indio" fue producto de una pesquisa que se había puesto en marcha en agosto de 2012. En el proceso quedó acreditado que Cabrera y su pareja se quedaban con la mitad del dinero que cobraba la encargada a los clientes del cabaret para acceder al hotel que funcionaba arriba, donde ejercían la prostitución mujeres que en su mayoría habían llegado al bar de Callao al 100 bis para iniciarse como bailarinas o coperas.

Fotografía: Rosario/12.