Dos Soda Stereo pasaron por Rosario. Charly Alberti y Zeta Bosio llegaron a la ciudad para brindar detalles de Séptimo Día, el espectáculo del Cirque Du Soleil que se presentará durante agosto en el predio de la ex Rural.
"Queríamos hacer sentir a la gente que esto era un lugar de alegría, un intento de volver a vivir sensaciones que habíamos vivido en otros momentos y que pensábamos que jamás las íbamos a volver a vivir. El circo te acerca esa capacidad de sorprenderte porque te lleva a tu parte de niño", dijo Bosio en retrospectiva al show que lleva girando más de un año.
La obra inspirada en la música de Soda Stereo llegará a la ciudad para despedirse de la gira mundial con seis funciones desde el 17 de agosto. Asimismo, se adelantó que por las características del predio de la ex Rural, se armará la carpa de hangar que brindará al público una apreciación diferente del show.
"Las dimensiones te dan una cercanía que te mete en el espectáculo de una manera que no pasa en otros lugares. La acústica es excelente. La música se mezcla en vivo como si la banda estuviera tocando y es algo que no tiene otro espectáculo del circo en otro formato. Lo que se nos ocurrió es tratar de tener los canales separados y ajustar hasta lograr que cada instrumento suene con el poder de una banda en vivo. Además, la carpa es blanca y las luces se reflejan de otra manera que en los lugares oscuros así que es increíble lo que van a ver", agregó el músico en su carácter de productor del espectáculo.
Respecto al significado que tuvo para ellos emprender este proyecto tras la muerte de Gustavo Cerati explicó: "Creo que sirvió también para que pudiéramos madurar nuestro duelo. Fue una experiencia en la que aprendimos mucho. Nunca habíamos hecho un trabajo de este tipo, adaptar nuestra música a las situaciones que requiere una obra. En un momento, Giles Martin nos dijo: 'Piensen que la gente va a escuchar su música por primera vez con los ojos'. Fue desde ese lado que nos adaptamos a trabajar en función de lo que necesitaba cada acto, sin traicionar el sonido y la musicalidad que tenían los temas y la historia de la banda".
"Creemos que Gustavo hubiese sido un promotor de esto, fundamentalmente porque le gustaba ir a más. Le gustaba descubrir cosas nuevas, más allá de que en algún momento, cuando en 2007 hicimos una gira con mucha producción donde pasaron muchas cosas, hizo referencia a que el circo era algo adonde uno podría llegar, desde el lugar de admiración desde el que uno ve al circo", añadió Alberti.
A la hora de elegir los temas, los músicos explicaron que se armaron dos listas con 30 canciones, una elaborada por la compañía canadiense y otra por ellos, encontrándose con la sorpresa de "casi un 95 por ciento de coincidencia”. "Como toda obra de circo, cada acto tiene su intervalo que también está musicalizado con temas que no estaban en la lista”, apuntó el baterista.
"Todo el proceso fue una linda excusa para repasar nuestra obra desde un lugar desde el que nunca lo habíamos hecho. Rescatar los masters originales multipistas, trabajar en remezclas, digitalizándolos y manipulándolos como lo permite la tecnología hoy en día. Todo eso tuvo una gran carga de emotividad por la pérdida de Gustavo que era muy reciente; con la herida un poco abierta, tratamos de encarar esto. Encontrarnos los dos en un estudio y sin Gustavo era algo muy emotivo", concluyó el bajista.