José Di Leo, el ayudante de campo del flamante director técnico de Rosario Central, Edgardo Bauza, reconoció que "nunca nos había pasado de estar un tiempo sin trabajar y uno mira el teléfono para ver las ofertas, pero cuando apareció Central dejé de mirar el teléfono, y no hablamos mucho, pero creo que al Patón le pasó lo mismo".
El "Camello" Di Leo, quien compartió con Bauza el equipo campeón de Central en 1987 dirigido por Angel Tulio Zof, declaró a la página oficial del club canalla sobre su vuelta a la institución que "todavía no lo puedo creer".
"Lo hablaba con mi hijo cuando venía y me daba melancolía por ver que cuando yo empecé a jugar estos árboles (de la Ciudad Deportiva de Granadero Baigorria) recién los plantaban y ahora están muy grandes, entonces pasaron dos cosas: que los árboles crecieron mucho o que yo estoy muy viejo, pero me parece que es la segunda", expresó el ex jugador centralista.
Consultado sobre su vuelta al club del barrio de Arroyito, Di Leo recordó que "nosotros tuvimos la suerte de dirigir en Primera División y de que nos fuera bien, pero antes también dirigimos en inferiores, donde hay gente muy valiosa que no siempre es reconocida, y es bueno volver a los orígenes".
Sobre el momento del regreso a Central, Di Leo sostuvo que "siempre querés volver, pero a veces no se dan los momentos para nosotros y para el club. La única vez que estuvimos cerca fue en 2009, pero en las otras no se dio porque coincidía que teníamos un contrato, en cambio ahora me parece que estamos en un momento justo porque tenemos una edad en que le podemos dar muchas cosas para mejorar al equipo y al club. Ojalá que nos vaya bien".
Consultado sobre el trabajo en Rosario Central, dijo que "cuando vas a trabajar no hay diferencias en el entrenamiento y en la dirección de los partidos, lo que cambia es el antes y el después porque sufrís igual o el doble que el hincha. Si el equipo pierde hay un montón de gente amiga que se siente mal, y cuando Central pierde hay un montón de gente que se amarga", concluyó.
